26/12/08

Entrada relámpago, cine de calidad.

Kontroll, 2003


Burn After Reading, 2008


La escafandra y la mariposa, 2007



Para todos los gustos.

23/12/08

Feliz Navidad

"Siempre creemos que la suerte es aquello que no tenemos..."
La Fille Sur Le Pont - Patrice Leconte, 1999


Feliz Navidad a todos y que tengáis un buen año 2009. Seguid buscando vuestra suerte, no esperéis por ella.

20/12/08

Esperanza

Esperanza era una niña preciosa. Tenía un cabello rizado del color del sol y deslumbraba con sus bucles al siempre asombrado gentío que la admiraba a su paso. Sus ojos eran verdes, enormes y brillantes, relucientes como dos esmeraldas engarzadas en una tez rosácea y limpia. Esperanza era, ya de niña, perfecta.

A Esperanza, cuando era joven, le encantaba jugar. Jugaba sola o con otros niños, incluso a veces jugaba con los mayores. Era jovial, viva, alegre, siempre tarareaba alguna cancioncilla o iba de un lado a otro saltando y correteando. Pero tenía un defecto, era una tramposa. Esperanza era muy inocente, nunca hacía daño a nadie a conciencia, pero le gustaba mucho ganar, creía siempre tener razón y acababa haciendo trampas para conseguir todo lo que se proponía y, en consecuencia, los otros niños se cabreaban y la dejaban sola, aunque pronto volvían a jugar con ella, porque era muy difícil no caer en el espectro de alegría y felicidad que la rodeaba, además de que lo hacía siempre sin malas intenciones.

Cuando creció, Esperanza se convirtió en una mujer perfecta, bellísima y al igual que cuando era pequeña, muy alegre. Todos la querían, Esperanza era la amiga perfecta, siempre animaba a todo el mundo, siempre daba consejos y nunca decía que no a alguien indeciso. Pero Esperanza no sabía lo que hacía. Seguía siendo igual de inocente que de niña y no se daba cuenta que los consejos que daba acababan haciendo mucho daño a la gente. Consejos de trabajo, de amor o incluso de salud. Muchos consejos que ella daba acababan siendo un fracaso en las vidas de sus amigos y conocidos, porque ella era demasiado impetuosa. Alocada, dirían algunos si no llegasen a ver su rostro angelical. Esperanza no se daba cuenta de que hacía mucho daño a la gente con falsas ideas, con proyectos e ilusiones que ella les animaba y les aseguraba que funcionarían. Esperanza era buena, pero se guiaba y dejaba guiar al resto por el corazón. Muchas veces, tras fracasar luego de ser aconsejados por ella, la gente se enfadaba e incluso había quién decía que la odiaba y nunca volvería a hablarle… pero siempre volvían.

Años después Esperanza se convirtió en una venerable anciana, con una belleza aletargada y guardada en el alma que nunca ninguna mujer tuvo antes. Su vitalidad era la misma, y el paso de los años le proporcionó las palabras ideales para que todos sus consejos, que solían ser castillos en el aire, sonasen de una forma irrechazable. ¡Que bien hablaba Esperanza! Esa mujer, conservada por el tiempo como una estrella incandescente que nunca se apaga seguía viviendo con la misma alegría que cuando era una preciosa niña de parvulario.

Cuando Esperanza murió mucha gente acudió a su entierro, mucha gente lloró junto a su tumba y muchos otros se sintieron perdidos y desamparados. Pero unos pocos, quizá los que más conocían a Esperanza, tras sentirse apenados decidieron sobreponerse y olvidarla, porque por su culpa habían fracasado, sufrido y llorado durante todas sus vidas. A partir de ese día, nunca más volvieron a hablar de Esperanza, nunca más recordaron su nombre, su rostro o sus palabras. Y nunca fueron tan felices como el resto de sus vidas sin Esperanza. Sin esperanza.

18 Oct 2006

15/12/08

¡Al Ladrón!

La frivolidad y la opulencia son los pilares que sustentan la moralina del buen ladrón. La necesidad (o no) del lujo se convierte en una adicción sanguínea de la que pocos logran huir, con más o menos interés por hacerlo.

El cine nos ha dejado películas de ladrones y estafadores de vitola de calidad. Desde la punta de pistola oscura e intimidante hasta los planes magistrales trazados en prodigiosas mentes criminales, los robos se han sucedido en la gran pantalla (y en la pequeña, faltaría más) prestándonos momentos legendarios para la altiva historia del cine.

Una de las mejores películas de ladrones y estafadores "El Golpe" Robert Redford y Paul Newman ponen en escena a dos artistas del birle, tan solo dos años después de "Dos hombres y un destino", otra legendaria película de dos de los más grandes actores que ha dado la cuna de actores americanos.

Por su parte, Steve McQueen nos dejó "La Gran Evasión", una historia bélica muy bien aderezada con las artes del robo y engaño de un cuerpo militar a imitación de los mejores capos del lumpen.

Pero lo cierto es que han sido en estas dos últimas décadas cuando nos han llegado algunas de las mejores películas de ladrones que se han realizado hasta ahora. Con Robert de Niro nos sumergimos en el mundo de la apropiación de lo ajeno con más o menos ética en "The Score", "Heat" y "Ronin". Tres películas bien logradas, aunque en general demasiado basadas en la acción y el la tracción motora a toda velocidad. Otras dos películas igualmente poco refinadas aunque algo más canallas son las que nos trajo Tarantino: "Pulp Fiction" y "Reservoir Dogs", genialidades sacadas de la manga de uno de los mejores y más complejos directores del momento. Sin escatimar en sangre, los ladrones hacen su trabajo de forma más o menos efectiva, y aunque esto sólo sirva de pretexto para las maquiavélicas intenciones de Quentin, este nos da una buena ración de pillaje sin ambages.

Pero las que quizá sean las grandes películas de ladrones de nuestro tiempo han sido dirigidas por Steven Soderbergh: La saga de Ocean's. Las tres películas forman una trilogía comercialmente extendida y demasiado explotada, pero combinando dotes de genialidad en el arte del timo y el teatro, que sustentados con millonarios planes de acción, nos sumergen en el mundo más meticuloso del robo a gran escala, con la sutileza del ladrón de guante blanco y la elegancia de Sinatra (que inició en realidad la saga, aunque con más pena que gloria, siendo justos).

Para acabar, también nos quedan un par de películas de falsificación y engaño, como son "Atrápame si puedes" del prolífico Di Caprio y "Los falsificadores", producción europea de novísima creación y con calidad suficiente en el submundo del hampa aunque envuelta en la dramática situación de la alemania nazi.


Los robos a mano armada se hacen a un lado ante los buenos artistas del género. Para ser un buen ladrón hay que ser buen actor y para ser actor, en definitiva, hay que ser un profesor de la falsedad, y esto, mi obstinado amigo (a quién va dedicada esta entrada), lo sabes tú mejor que nadie.


8/12/08

Sin poder dormir

La radio nocturna no es capaz de calmar mis inquietudes, me revuelvo en devanares soñolientos en una cama vacía. Un pensamiento viaja aquí y allá buscando una respuesta, una solución, una aproximación ficticia pero sedante de un futuro incierto.

No veo más allá de mis propias cavilaciones oscuras, de las locuras de un borracho, del momento en que reprimo un grito, un infatigable motivo que arriesga mi propia cordura para conseguir nublar mis pensamientos cada segundo, cada minuto, cada momento noctámbulo en el que quiero olvidar todo y hacer desaparecer los fantasmas de Morfeo.

La noche sigue su curso, un indómito crisol cargado de sensaciones hasta ahora olvidadas vierte en mi alma deseos corrosivos, y sigo sin poder dormir.

18 Mayo 2005

22/11/08

H

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La composición química de la heroína no es cosa de niños. Una alteración química de la morfina transforma a este opiáceo en una de las drogas más potentes y adictivas que existen. El Nueva York de los setenta o la propia España de los ochenta, son ejemplos claros de como la heroína agarra y destroza a sus presas sin piedad, causando una voraz adicción y un deterioro físico y psicosocial evidente y raudo.

Sin embargo, sus efectos a corto plazo, como la euforia, evasión y sedación y su particular forma de ser ingerida (intravenosa) la convierten en una droga con cierto misticismo que el cine ha recogido durante varios años en numerosas películas.

No se puede hablar de drogas y cine sin mencionar la afamada película de Darren Aronofsky: Requiem por un sueño. Una magnífica película tan cruda como directa. Desde la televisión a la heroína se nos ofrecen sin ambages los efectos de las drogas en un grupo de tres jóvenes y la madre de uno de ellos.

Otro de los iconos del cine en el ámbito de las drogas y en particular de la heroína es Trainspotting, que con Ewan McGregor a la cabeza nos muestra desde un punto de vista entre la comedia y la decadencia los problemas con la heroína y la situaciones que los envuelven siempre relacionados con la droga. Otra película cruda pero que se ha convertido en cine de culto con el paso del tiempo.


En España también hay cine relacionado con la dama blanca, como la película de Heroína, que hace buen uso del juego de palabras para mostrarnos una batalla con pocas esperanzas para derrotar al pequeño universo de drogas que la rodea.

Para acabar, mencionaremos algunas películas que sin tratar abiertamente los problemas con la heroína, es cierto que esta juega un componente fundamental o al menos importante, tanto en la historia como en la caracterización de los personajes. Véase por ejemplo Ray, la biografía de Ray Charles fuertemente marcada por su adiccío, una adicción que aparece incluso en películas tan tiernas como Pequeña Miss Sunshine, o en esas leyendas del cine moderno como Pulp Fiction.

No podemos olvidar tampoco American Gangster, la penúltima gran obra de Ridley Scott que nos enseña el duro y problemático Harlem de los setenta.


Aunque la heroína se vendiese a principios de siglo como un supresor de la tos por parte de Bayer y luego como una forma de desengancharse de la morfina, su historia deja tras de sí un buen reguero de muertes, decadencia y miseria. Por eso, aunque tratemos el tema con laxitud y despreocupación, bien merecería una entrada más seria hablando de los problemas crudos y reales que ha causado durante la historia. Una historia cruda. Directa. En vena.

8/11/08

Made in USA

Hay muchas cosas que no sabemos de los Estados Unidos. Sabemos que están ahí y nos suenan, pero no las conocemos con exactitud. Curiosidades inútiles pero interesantes en ocasiones.

Cuando hablamos de Estados Unidos todos sabemos que se componen de muchos estados y todos conocemos Nueva York y su vecina Nueva Jersey, Florida, California... ¿alguien da más? Hay un buen número de estados que no conocemos, y aunque nos suenen no sabemos si son estados o ciudades y desde luego no sabemos situarlos. Vermont, Kansas y Arkansas, Tennessee, Rhode Island, Connecticut... ¿sabes dónde están?

Además muchas ciudades famosas están en estados no tan famosos, como Chicago, en el estado de Illinois, aunque su capital sea Springfield. El estado de Nueva York tiene su capital en Albany, y no en NYC (ciudad de Nueva York). Detroit está en Michigan y tampoco es capital, así como Cheyenne es la capital del estado de Wyoming (suena a película del oeste ¿verdad?) Por otra parte, la capital de Texas es la desconocida Austin, pero en ese estado podemos encontrar a Houston o Dallas. Phoenix es la capital del estado de Arizona y Carson City la del estado de Nevada, famoso por la ciudad de Las Vegas. Ciudades como Baltimore (Maryland) o Boston (Massachusetts) también son ejemplos del desconcierto general que genera la geografía yankee.

Uno de los detalles más curiosos es su capital, Washington D.C., no situada en ningún estado, sino en el Distrito de Columbia. No confundir con el estado de Washington en el noroeste del país.

Por otra parte, tenemos su moneda, genuina, mítica y deseada. Los dólares, verdes y de igual tamaño, la forma más sencilla de diferenciarlos es por las caras que nos enseñan. ¿Pero quienes son esos personajes? ¿Presidentes? No todos.

El billete de un dólar tiene la cara de George Washington, primer presidente de los EEUU. Abraham Lincoln está en los billetes de cinco dólares, siendo el decimosexto presidente de los EEUU y uno de los iconos de la democracia americana. Sin embargo, los billetes de diez dólares contienen la estampa de Alexander Hamilton, que no fue presidente sino economista. Los de veinte nos muestran a Andrew Jackson, séptimo presidente y los de cincuenta a Ulysses S. Grant, el decimoctavo en discordia. Sin embargo el de cien dólares, Benjamin Franklin fue un científico estadounidense. Y ya no hablemos de las monedas o de los extintos billetes, entre ellos el de cien mil dólares. ¿Sabías todo esto?

¿Y qué me decís de la afamada bandera? Tiene trece franjas entre rojas y blancas que representan a las colonias británicas, y un número cambiante de estrellas blancas sobre un fondo azul que representan la fusión en una unión de los estados, actualmente cincuenta.


¿Y qué hay de Nueva York? Sólo contaremos ahora uno de los detalles más famosos y misteriosos de la gran manzana. ¿Sabes qué es el vapor de las calles? No todo el mundo lo sabe, ni siquiera los 'newyorkers'. No es ni más ni menos que vapor procedente del sistema de cogeneración de la ciudad (el más grande del mundo), bien fugas de tuberías o bien agua que entra en contacto con las tuberías calientes.



Se podía hablar mucho de EEUU, así como de otros países, pero me pareció adecuado contaros estas curiosidades porque seguro que todos conocíamos infinidad de curiosidades a medias debido a la influencia del 'país de las oportunidades'. Espero que os haya gustado o al menos aclarado algunas cosas.

Hasta la próxima.

2/11/08

Coltán

Apostar que la mayoría de los que han leído la palabra "coltán" desconocen su significado es apostar a caballo ganador. En general nadie sabe ni su origen ni sus implicaciones, nadie sabe que es ni para que sirve. Nadie sabe nada del coltán ni nadie habla de él. Ni la gente ni los medios, pero seguro que todos dependemos de este extraño mineral.


Es necesario y obvio aclarar qué es el coltán exactamente. El coltán es el nombre vulgar que se da a la combinación mineralógica de columbita y tantalita, dos elementos compuestos (cuya fórmula no expondremos aquí) que se encuentran en la naturaleza. El columbio y el tantalio son metales raros, poco útiles (o eso se creía) y escasos. Lo que parecía nada más que una casualidad química se convirtió con el paso del tiempo en uno de los metales más valiosos del planeta, la panacea de los componentes electrónicos y una nueva fuente de conflictos y miseria, de muerte y corrupción.

El nuevo oro es el coltán, del que se extrae el tántalo, un elemento con unas maravillosas propiedades eléctricas como superconductividad, capacidades refractarias (capaz de soportar grandes temperaturas sin dañarse), muy buena capacidad de almacenaje de carga eléctrica (fundamental para los condensadores electrónicos) y muy maleable. Esta maravilla científico-tecnológica ha servido para que cada vez nuestros 'gadgets' sean más pequeños y livianos, más avanzados y potentes. En particular la telefonía móvil vive del coltán como nosotros del aire. En general es la industria que más necesita el coltán para producir sus nuevos teléfonos cada vez más transformados en pequeños ordenadores. No obstante, todo el sector electrónico también necesita el coltán en menor medida, desde los nuevos televisores hasta los satélites espaciales, pasando por cualquier elemento como MP3 o MP4, videoconsolas (Sony retrasó el lanzamiento de la PS2 hace unos años por escasez de coltán), ordenadores y un sinfín de elementos electrónicos sin los cuales la vida se nos haría, por lo pronto, más aburrida.


¿Cual es el problema? Parece que el coltán supone beneficios a la tecnología y al avance científico. Pero como era de esperar, los anuncios de televisión sólo muestran la cara amable de los productos. Nadie habla de 'La guerra del coltán' ni de sus oscuros y terribles orígenes.

Aunque Australia sea la primera productora mundial (o más bien procesadora) las mayores reservas de coltán en el planeta (se estima que un 80%) se encuentran en El Congo, África. Es difícil abordar en una sola entrada de un ridículo blog toda la guerra del Congo, los problemas asociados y la miseria implícita. Sin embargo, es sabido que en general, las milicias del país africano explotan las minas de coltán de un modo esclavista (sin exagerar) para financiar su patética guerra contra el gobierno, matando animales en vías de extinción (gorilas de montaña o elefantes, entre otros) y destruyendo paraísos naturales. Lo que podía ser una riqueza para el país y una vía de escape para la abyecta miseria del país centroafricano se ha convertido en un problema todavía mayor. Países como Rwanda (con algunas reservas propias) o Uganda (sin reservas propias de coltán) se han enriquecido robando coltán al Congo y vendiéndolo bajo dudosa legalidad a las grandes multinacionales de electrónica (Sony, IBM, Hitachi, Samsung, Toshiba, LG, Philips...)

La extracción de coltán se realiza de una forma, como hemos dicho, esclavista y nunca mejor dicho, tercermundista. Se dice que es el mismo sistema que se usaba allá por el 1800 en California para extraer oro, picando las vetas y decantándolo tras inundarlas. El sistema, aparte de inhumano y arcaico, genera serios problemas de salud asociados, tanto a la extracción como a la exposición prolongada al coltán. Y cuando parece que nada puede ser peor, resulta que los principales 'mineros' del coltán son niños, trabajando de sol a sol.

Aunque la parafernalia burocrática de Naciones Unidas o países asociados al congo como Bélgica hayan tratado de advertir que la compra de coltán al Congo es una forma de alimentar a la muerte y la guerra, las multinacionales siguen produciendo sus componentes a una escala gigantesca y descontrolada. La necesidad del coltán es razonablemente indiscutible, pero las condiciones y problemas que genera envuelven al desarrollo tecnológico en una vestimenta inmoral y gobernada por los beneficios. Coltán sí, pero con control.

Por eso, cuando pienses cambiar de móvil, comprar una televisión nueva u otro ordenador, piensa dos veces si de verdad lo necesitas y que, quizá, sin saberlo te estés manchando las manos de sangre. O quizá sí lo sepas.

31/10/08

Cicatería intelectual

Deportes, televisión, parejas. Los tres grandes placeres del vulgo que acaparan todo el espectro intelectual al que aspiramos. Tres placeres irresistiblemente eficaces y esenciales, que se extienden a través de la sociedad como una neblina densa y gélida y bullen entre el populacho con ponzoñoso rigor. La gente, en definitiva, es idiota.

Cada día me resulta más complicado encontrar entre la gran masa social de mi entorno más o menos cercano a gente que se escape de los patrones preformados de estilo, interés y gusto. La sociedad se estandariza como cualquier proceso productivo y se modifica en función del negocio requerido, generando elementos idénticos, sencillos, de usar y tirar, que funcionan sin complejidad, no se quejan demasiado y son fáciles de sustituir o modificar. Una palestina, una camisa rosa, un grueso anillo dorado, una camiseta o un peinado generan un denso campo gravitatorio para masas encefálicas vacías que caen atrapados como moscas. Desde camisetas del Ché hasta cocodrilos estampados en un fondo rosa, se ha perdido el estilo, la originalidad, la evocación de lo genuino.

Desde los neófitos lechuguinos con un severo déficit de autosuficiencia y unos hormonados niveles de ignorancia hasta los veteranos y consolidados elementos 'auténticos' de la moda en cuestión, la falta de interés por lo espiritual y lo fecundo se extiende por la sociedad como una mala peste, un mal olor en una habitación sin salida, un cadáver bajo el sofá.

Leer un libro, ver una buena película, aprender un idioma, sentarse ante el mar, un amanecer, relajarse y tan solo pensar, charlar, una buena canción, viajar, soñar despierto y sobre todo, tener ambiciones intelectuales son los pilares básicos de una dieta sana para el alma, que cada día, un autobús, una cola en la panadería o un 'pub' nos enseña que está más descuidada y marchita, renegada a la mediocridad y al olvido, al desaliento y a la muerte.

Y aquí estoy yo, siendo incluso peor.

20/10/08

La perla de África

En general la gente no quiere ni oír hablar de este viaje por miedo, comúnmente sustentado en la ignorancia, y los que queremos ansiosamente poder descubrir la magia del corazón de África, lo hacemos con inconsciencia. La perla de África es Uganda, un país del centro de África que contiene todo lo que el continente africano ofrece: naturaleza salvaje en estado puro. Intentaré con esta entrada despertar vuestra curiosidad y al menos daros otra idea del continente africano, que no siempre se reduce a enfermedades y guerra.

Uganda está situado en el centro de África, lindante con otras naciones africanas como Kenya, Sudán, Congo, Ruanda y Tanzania, con quien comparte el Lago Victoria. Sus dos principales ciudades son Kampala y Entebbe. Posee algo menos de treinta millones de habitantes que hablán inglés y swahili como lenguas oficiales. Es un país con un régimen democrático y es de los más estables del continente, aunque existen conflictos en vías de solución con grupos armados en el norte del país.
¿Qué se nos ha perdido en Uganda? Posiblemente nada. Posiblemente el viajar a Uganda sea una de esas locuras pasajeras que van y vienen y que, generalmente, quedan perdidas y olvidadas con el tiempo y la distancia. Pero lo cierto que es difícil negar la belleza y el atractivo del continente africano, cuna de la raza humana y último bastión de una naturaleza salvaje y anacrónica que persiste en la lucha contra la mano del hombre. Desde las "Murchison Falls" donde el Nilo se comprime en unos pocos metros dando lugar a la mayor fuerza hidráulica natural del planeta, hasta el parque nacional "Queen Elizabeth", la visión que ofrece el país africano no tiene comparación.

Otro de los grandes atractivos es la visita a los gorilas. Contratando los permisos con mucha antelación y tras una caminata a la montaña de tres o cuatro horas, se llega a localizar a los gorilas de montaña, en estado salvaje y ver a un pariente lejano del hombre (de unos más lejanos que de otros, pero eso es otra historia) y disfrutar de su ambigua compañía durante una hora. El viaje es caro, duro, cansino y largo, pero cuando África llama, el corazón responde.

Si el dormir en un campamento en pleno parque nacional con las estrellas como único techo y al despertar poder ver el saludo al sol de un grupo de elefantes o jirafas a una decena de metros no es suficiente atractivo para viajar, entonces es obvio que el viaje poco significa para ti. Para mi, ¿qué se me ha perdido en Uganda? La respuesta es... Uganda.

12/10/08

Autobuses, libros y notas musicales.

19:02, bajando el ascensor pienso que voy a perder el bus, pero la sobriedad de la esperanza me dice que no, que "voy sobrado". Cuando veo casi en el horizonte de la grisácea avenida de la Florida una forma verde y blanca, que se aleja como un elefante en temporizada estampida quiero creer que no es un '11' el número que identifica al autobús. Quizá un tardío 'C5' o un siempre impredecible '29'. No.

Una vez perdido el bus de rigor, la sucesión de eventos que llevan a coger una conexión decente en algún otro lugar fluctúa entre las prisas y el ridículo al sondear como un pato mareado la mejor opción para llegar a mi educativo destino. Mientras, en mi 'jukebox' (ya sabéis un sinónimo de MP3) sonaba el genial Jazz de Charlie Parker y Miles Davis. Una maravillosa combinación viva desde los años 40, que recopila lo mejor de los duetos de dos de los más grandes genios del Jazz clásico.
Cuando acabó el disco, el mastodóntico vehículo seguía arrastrándose penosamente por las enrevesadas calles de Vigo, y automáticamente la electrónica hizo dispararse el otro disco de otro de los grandes. Louis Amstrong. No es ni el de la luna ni el de la bici. Ni Neil ni Lance, es el genuino. A ritmo de su voz potente y retorcida y de la potencia suave y alegre de su trompeta la tarde continuó hasta la llegada a una calle de cuyo nombre...

La vuelta a casa se preveía dura, aburrida, martirizante y sobre todo, lenta. Pero... ¡sorpresa! Un libro se escondía en mi macuto, y fue así como acompañado por El Lobo Estepario, llegué a casa con un hervidero en la mente de profundas y complejas reflexiones, con un halo de una felicidad infinita que se esconde en la tragedia y la miseria de Henry Haller.

Con eso os dejo unas ideas para que las toméis como gustéis: preferiblemente con un café y un sofá.

Hasta la próxima.

10/10/08

Viernes, 10 de Octubre.

La calle Florida se extiende ante mi ventana, temblorosa por lo que cuentan desde el ayuntamiento. Los árboles perennes de siempre siguen donde siempre y los tortuosos 'Vitrasa' van y vienen con un paso relajado y cansino.

Hace ya casi medio año que el 'blog' cerró sus puertas aplastado por el aburrimiento, la pereza y la desidia. En este tiempo poco ha cambiado aunque sucediesen muchas cosas. Las vueltas que da la vida volvieron a su punto de partida y me sentaron frente a mi pálida pantalla para volver a escribir en el blog. He dejado atrás muchos exámenes, muchos kilómetros y una buena dosis de perogrulladas de medio pelo o de pelo y medio.

Mi humilde cámara sacó algunas nuevas fotos, desde las costas pedregosas de los populares escondrijos de Asturias, hasta la tierra del derroche y el consumo, dónde la mañana es un azulado tapiz de estrellas y el anochecer se confunde con franjas rojas y blancas.
Photobucket
En cualquier caso, el blog vuelve a estar abierto para los que deseen perder el poco tiempo que cuesta pasear por estas praderas de estulticia y vanidad. Espero que con mejor futuro y empeño que la pasada experiencia.

Bienvenidos de nuevo.

20/4/08

¿Has cerrado el blog? ¿Por qué?

Hay preguntas que surgen de lo más profundo del corazón. En ese extraño y manido sitio debe existir un pequeño generador de preguntas, a cual más compleja. El caso es que en ocasiones esas cuestiones no son procesadas por la materia gris y bullen a la velocidad del rayo hacia los nervios que controlan la dicción para salir en un efluvio sonoro, como un espasmo involuntario del que quizá ni el que pregunta es consciente.

"¿Has cerrado el blog? ¿Por qué?" Cuando este tipo de cuestiones surgen un mes después de que el blog fuese castrado me pregunto yo: "¿Si has tardado un mes en darte cuenta de que está cerrado, no crees que ese quizá sea el motivo?". Es obvio que no todo el mundo pregunta, pues eran pocos (y son menos) los que leen este pedazo de ******, pero no deja de ser curioso que algunos lo hagan con toda la naturalidad.

En cualquier caso, el cierre es indefinido e indefinido seguirá siendo, hasta que llegue el día de quitarle/me la herrumbre y volver a darle lustre con palabrería barata, perogrulladas de poca monta e ironías eventuales, por ende, hasta la próxima, si es que la próxima llega hasta aquí.

20/3/08

Cierre indefinido

En ocasiones, la ambición extiende talones que la realidad no puede asumir y mientras la desidia hace las suyas, el sumatorio de pequeños fracasos hace que se genere irremediablemente un peso muerto a la espaldas del ánimo y en definitiva acaba aplastando irremediablemente la propia naturaleza de su comienzo.

Por tanto, el cierre queda echado de forma indefinida ante la escasa proliferación de ideas, ilusiones y ánimos para sacarlo adelante. No obstante, queda abierto para que aquellos que deseen, bajo su propia responsabilidad, beber de este manantial ponzoñoso de ideas de Perogrullo.

Un hasta luego es una despedida mucho más recatada y esperanzadora, por tanto, hasta luego sea, aunque luego no vuelva hasta mucho más tarde. Gracias a los que habéis paseado por este jardín de zarzas de cuando en cuando y... hasta luego.

28/2/08

Vuelta al tajo.

¡Hola amiguitos! ¿Ansiosos? Apuesto a que no. Sin embargo no os será tan sencillo libraros de mi, recién llegado del corazón del viejo continente y listo para contaros alguna de esas perogrulladas que tanto me gustan y a algunos (que lo se) no os desagradan.

El caso es que en este tiempo de descanso, en la época en la que muere el frío y tembloroso invierno y la primavera comienza a hervir las flores de los jardines, no he tenido tiempo de preparar ningún artículo interesante ni de ver más de un par de películas y descubrir un poco de nueva música, y mucho menos de leer un libro que os pueda gustar (aunque estoy en ello y en breve os contaré). La situación ha derivado irremediablemente en la clásica y vespertina costumbre que fulmina las siestas y agita los bostezos de enseñar las manidas fotos de un viaje que ni os interesa ni os debe interesar, pero a falta de mejores contenidos más amenos creo que una pequeña introducción visual a algunos de los parajes en los que nos hallamos los pasados días no os harán ningún daño e incluso a alguno le harán levantar una oreja con un renacido aunque despistado interés.

Aquí os dejo con algunas de las fotos que más me han gustado de entre la gran maraña de disparos que he hecho con mi muy humilde cámara. Espero que os gusten. En pocos días intentaré poner algún contenido más interesante. ¡Un saludo!






Si queréis ver las fotos en un tamaño más grande, entrad en este link.

17/1/08

Reajuste eventual de contenidos

Con este término, "Reajuste eventual de contenidos" os digo con un soberano eufemismo digno de cualquier jefe de prensa de cualquier multinacional que voy a abandonaros una temporada. Como comprobaréis el blog no ha sido actualizado desde hace ya casi dos semanas, no por falta de ganas sino por falta de tiempo, que como siempre, es tirano de todos. La efímera sarta de pamplinas que os cuento de cuando en cuando no podrá volver antes de finales de Febrero, dejando al hermano pequeño de la familia del calendario sin contenidos hasta que se agoten sus días. Prometo volver con un par de artículos que espero que os gusten: el boxeo en el cine y la Segunda Guerra Mundial.

Sin embargo, me veo en la leonina obligación de incitaros a no olvidar los pasados artículos, en los cuales seguro que encontraréis alguna película o canción recomendada que os hará pasar un buen rato mientras mis obligaciones hacen presa de mi. También hoy os recomendaré tres libros para que podáis elegir al gusto y si os apetece leerlos y como siempre disfrutar de uno de los grandes placeres del mundo del arte: la lectura.

Para empezar podéis probar con "Balzac y la joven costurera china", un pequeño libro de Dai Sije, corto y ameno y que narra las vicisitudes de dos jóvenes durante 1971 en un poblado de la China profunda.

Otra opción, mucho más densa y compleja es "Nuestra Señora de París", una de las obras maestras de Victor Hugo y un espectáculo de narrativa y drama en el París del siglo XVI.

Por último y siendo un buen colofón creo que "Los Asesinatos de Manhattan" de Preston&Child es una magnífica obra, basada en el Manhattan moderno y narrando con maestría una historia de intrigas y aventuras de la saga del agente del FBI Pendergast.

Bueno, os dejo una lista de tareas que podéis hacer, que si bien no os proporcionan ningún conocimiento práctico a primera vista, son tres magníficos libros que no pasan desapercibidos. Con esto me despido hasta dentro de una decena de días contados dos veces más una, aproximadamente.

¡Hasta pronto!

5/1/08

Clint Eastwood: de las balas a las lágrimas.

Hace ya 77 años que nació en San Francisco, California el que hoy es uno de los más míticos actores de Hollywood de todos los tiempos y uno de los mejores directores de esta época: Clint Eastwood.

Los tres primeros papeles de Clint en el cine han sido (y serán) tres películas de referencia del western (y que J.Wayne nos perdone) que crean el subgénero del "Spaghetti Western" y suponen un inicio estelar en la gran pantalla bajo la dirección del genial Sergio Leone y con la ya legendaria ambientación musical de Ennio Morricone, creando un trío y una trilogía inolvidables: "Por un puñado de dólares - Sergio Leone, 1964", "La muerte tenía un precio - Sergio Leone, 1965" y "El Bueno, el Feo y el Malo - Sergio Leone, 1966". La trilogía del hombre sin nombre, del pistolero rubio y letal, rápido y silencioso, y sobre todo duro como el acero y frío como el hielo. La imagen de Clint se forjaba pronto y perduraría casi hasta el presente.

Películas de menor calado pero que no hicieron perder relumbre a Clint fueron "La leyenda de la ciudad sin nombre - Joshua Logan, 1969" y "Dos mulas y una mujer - Don Siegel, 1970". Dos westerns de distinta factura pero que se sumaban a una buena lista de títulos que seguían dejando la marca de Eastwood en el cine, que sería todavía más honda cuando cobró vida el inspector Harry 'Sucio' Callahan en "Harry el sucio - Don Siegel, 1971" creando así la base para un tetralogía que fue paulatinamente perdiendo calidad desde la primera pero consiguiendo dejar al bueno de Clint como uno de los más duros de la industria del cine. Fue en este punto donde Eastwood comenzó a dirigir sus propias películas y tras un par de intentos de bajo nivel protagoniza y dirige un extraño western: "Infierno de cobardes - Clint Eastwood, 1973". Se suceden así una serie de películas de no poca calidad pero que no llegan a marcar un hito, acrecentando su imagen de duro donde me gusta destacar "El Sargento de Hierro - Clint Eastwood, 1986".

Pero pronto cambiaría Clint. Bajo esas eternas arrugas de acero y ese insalvable adarve de dureza se encontraba un director de una sensibilidad pasmosa, que dejó su primera y genial huella en "Sin Perdón - Clint Eastwood - 1992", filme que le valió para conseguir la nominación al Oscar a mejor actor y ganar las de mejor película y mejor director, una hazaña a la altura de pocos. Posteriormente sigue fraguando su nueva faceta de director cuidadoso y con gran control sobre las emociones que nos envía en "Un mundo perfecto - Clint Eastwood, 1993", un genial drama protagonizado por Kevin Costner que a nadie puede dejar indiferente. Pero sería en 1995 cuando el viejo Clint sienta la base para una de las grandes películas de la historia, un mítico drama de una ternura y sensibilidad que muy pocos han conseguido siquiera vislumbrar, la debilidad de un servidor y una obra maestra de la interpretación y la dirección: "Los puentes de Madison - Clint Eastwood, 1995" que se alzaba con el Globo de Oro al mejor director. Posteriormente la estela de Eastwood se debilitó y se redujo considerablemente, en dos obras de medio nivel como "Medianoche en el jardín del bien y del mal - Clint Eastwood, 1997" y "Space Cowboys - Clint Eastwood, 2000". La carrera de Clint parecía algo más oscurecida y no se vislumbraba en sus películas la magnificencia de las tres anteriores.

Pero de nuevo se hizo la luz. Clint volvía a sorprender y a coger al público sensiblero en pañales dejando de nuevo más de una lágrima frente a las pantallas con "Mystic River - Clint Eastwood, 2003" alzándose con dos candidaturas por película y dirección al Oscar y sus homónimas de los Globos de Oro. Sin embargo, no se quedaría aquí Clint, y tras este alarde cinematográfico vuelve a golpear, y nunca mejor dicho, con "Million Dollar Baby - Clint Eastwood, 2004", otro de los prodigios salidos de la batuta de uno de los más grandes y una película que cala hondo entre las mejores. Por esta última película se ganó su último Oscar al mejor director, así como el Globo de Oro y el Oscar a la mejor película. Morgan Freeman ganaba un merecidísimo Oscar al mejor secundario a la preciosa Hillary Swank conseguía su segunda estatuilla a mejor actriz.

Así llegamos a las dos últimas obras de Eastwood. "Banderas de Nuestros Padres - Clint Eastwood, 2006" y "Cartas desde Iwo Jima - Clint Eastwood, 2006" mostrando las dos crueles caras de la mítica fotografía del ejército de los EEUU y empatizando con los soldados del bando japonés. Clint lo volvió a conseguir. De nuevo las candidaturas a película y dirección llegaron en torrente, aunque en esta ocasión se quedó sin los premios gordos.

Mucho hemos dicho sobre Clint y otro tanto se nos queda en el tintero. Sin duda Clint se ha labrado una carrera digna de los mejores, tanto delante como detrás de una cámara. A sus 77 años dice no sentirse cansado y que no ve motivo para dejar las cámaras. Desde aquí, te lo agradecemos.

2/1/08

No es país para viejos.

No, no. No se trata de una parodia sobre Ross Perot, sino la última película de los hermanos Coen, que está arrasando en todas las entregas de premios de medio mundo. Aquí os dejo el trailer, de nuevo cortesía de CINeol. Con todos ustedes "No es país para viejos"




¡Feliz entrada de año a todos!